-Agente, le repito que no tengo nada más que decir.
Vaya puto día que me ha tocado en suerte. Esta pandilla de descerebrados no sabe lo que hace y de todos modos tienen que resolver un caso de asesinato, nada más y nada menos que del “boss”. No tengo nada de ganas de hablar. Es una puta perdida del tiempo.
-¿Sabéis quién cojones soy al menos?
- Sí, AG, sabemos que trabajaste en el FBI años atrás y que no saliste muy bien parado a decir verdad. Algunos asuntos “turbios”, por lo que se comenta.
- Parece que habéis hecho al menos vuestros deberes.
Aquella temporada fue horrorosa, un departamento corrupto a más no poder, tarde o temprano estaba claro que aquello me salpicaría de algún u otro modo. ¡Maldita sea! Me sale todo al revés. No puedo tener peor suerte en esta perra vida que me ha tocado vivir…
-¿NicoStrike o Eldemo no han hablado con vosotros? Como superior suyo les di las órdenes pertinentes en el tiroteo y después de que acabase satisfactoriamente salí a fumar un pitillo. ¿Es legal fumar al aire libre no?
- Queríamos verificarlo, nada más.
Joder, estos están más perdidos que un pulpo en un garaje. No tienen ni puta idea de lo que significaba el comisario para nosotros. Ni en lo que estaba metido. No sé qué ha pasado allá después del tiroteo, a decir verdad no me importa mucho. Este grupo de perdedores que me ha tocado en suerte no es lo mío. Aunque, bien pensado, estaría bien si pudiese resolver este caso y hacer méritos para volver a mi antiguo empleo, algo con más rango, mejor valorado. No soporto este trabajo ni a esta gente. Mis dos subordinados puede que sean buenas personas, pero no pienso perder mucho rato hablando con ellos. No los necesito. Me basto y me sobro yo solo.
- Bien, chavales, me marcho. Si queréis saber algo más, leéis mi informe y punto.
Vaya puto tiempo. No para de llover. Tengo un par de pistas que estos chupatintas no podrían unir en su puta vida. Mejor duermo un poco y empiezo a investigar algo a la noche. Estoy cansado y me vendrá bien tener la cabeza despejada. Presiento que mi vida está a punto de cambiar.
-Agente, le repito que no tengo nada más que decir.